Ya fue el *, estuvo rico, se llamaba Carlota

el * (léase "el hm") = el pastel.

Es que hoy fue viernes de cursipastel en mi ofi por cumple de una compañerita. Me puse un tanto celosa al principio porque en mi cumple -hace exactos dos meses- NaIdeN del work se acordó, pero bueno es que cayó en sabado y no avisé a nadie, tons pos como quiero que sepan. Es que esa es la historia de mi vida: sin darme cuenta espero que la gente me adivine el pensamiento, casi casi que me intuya, ni que fueran Walter Mercado o Giovanita, tons pues ya me cargó la chingada. La cosa es que dije a la mierda con los celos pendejos que cargo desde que tengo uso de razón, porque sí, soy bien celosa, aunque no lo demuestro, es más soy tan celosa que la verdad me doy miedo, entre miedo y asco, porque los celos son inseguridad y ay de aquel que sea inseguro en este salvaje mundo de fieras. Bueno lo que sea, el chiste es que luego se me pasó y disfruté muy pero muy rico el hm con toda la banda oficinesca.

Chale, he notado que en el párrafo anterior como que intenté decir que me doy asco! y es que a veces sí, hay cosas de mí que no me gustan ni tantito. En el fondo sí me amo como soy, pero igual hay chingo de cosas que quiero cambiar, y para poder cambiarlas hace falta primero saber cuales son.

1. Mi capacidad extrema para sentir celos de cualquier pendejada. En pareja creo que no aplica tanto porque no me gusta controlar ni forzar a la gente, principalmente porque me caga sobremanera que me lo hagan a mí; pero en otro tipo de relaciones o situaciones no amorosas sí tiendo a ser un tanto celosa y sobre todo sentida.

2. Mi obsesión por analizar mis acciones hasta el cansancio. Es clásico que voy en el coche y me atormento: "esto estuvo mal, esto se vio mal, debí haber dicho esto, debí haber demostrado lo otro". Esto me sucede a veces, tengo épocas en que ultimadamadre me vale mentes, pero hay etapas en las que me tengo que decir a mí misma "ay yaaaa basta!!!".

3. Mi disponibilidad a enlistar lo que no me gusta de mí antes de mandar a todos derechito a chingar a su madre. Esto habla por sí mismo y es relativo al hecho de que primero me echo la culpa a mí y luego volteo a ver qué pedo con los demás.

Así que:

Nótese que hoy ya estoy pero bastante de buenas, porque lo que fue ayer... conviví con mis demonios -o sea yo mesma- hasta que al fin sudé y me agoté en ensayo y llegué a mi casa hecha una divina seda.